Los hay prácticamente de todos los colores y sabores. Y es que la coctelería es un arte en el que todo es posible gracias al talento e imaginación de los grandes ‘cocktailmen’. Sin embargo, no todos los combinados son igual de idóneos para cada momento: no es lo mismo la hora del aperitivo que la media tarde; que haga un día cálido en el que lo que más apetece es refrescar el paladar o que, por el contrario, nos apetezca entonar el cuerpo con algo más templado… Éste es un pequeño esquema en este sentido:
Para la hora del aperitivo:
Son recomendables combinados como el Martini (en cualquiera de sus tres tipos: seco, semiseco o dulce), el daiquiri, el Manhattan… en general, los que no estén cargados de licores dulces ni lleven huevo, leche, nata, canela… También son recomendalbles los ‘sin alcohol’ y los jugos de frutas (de tomate, naranja, limón, uvas, pomelo, piña…).
Para refrescarse:
los llamados fizzs (bebida muy agradable para tomar a cualquier hora del día, particularmente cuando el organismo está fatigado). De todos ellos, el Gin Fizz es el más solicitado. También son una buena opción los preparados con agua o sifón.
Los más nutritivos:
En la merienda o cuando aún falta un buen rato para la comida resultan adecuados aquellos cócteles que llevan huevo, nata, leche… Es el caso de los llamados flips (todos ellos con yema de huevo como ingrediente).
Para entrar en calor:
Los grogs o los punches, que se sirven en caliente, a base de bebidas como coñac, ron o whisky.
