La fotoperiodista Isadora Romero Paz y Miño ganó el premio de formato abierto, categoría regional en el World Press Photo 2022 (premio mundial de fotografía), lo que le hace acreedora a 6.500, euros; además sus trabajos estarán en exhibición a partir del 15 de abril en Amsterdam- Holanda, antes de recorrer de forma itinerante por el mundo.
Las propuestas que fueron seleccionadas alcanzaron varios requisitos que la compatriota cumplió, como alta calidad técnica y una historia interesante que contar. Alrededor de 64.823 trabajos, pertenecientes a 4066 fotógrafos de 130 países disputaron este galardón.
El trabajo presentado por la ecuatoriana titulado “Blood is a Seed”, en español “La Sangre es una Semilla” es un documental fotográfico que, en general, cuestiona la desaparición de semillas, la migración forzada, el racismo, la colonización y la pérdida de los conocimientos ancestrales. Aquí recorre los límites entre el arte y el fotoperiodismo, afirman los especialistas.
La presidenta del Jurado Calificador Rena Effendi al dar el veredicto expresó “El ganador del Premio de formato abierto “Blood is a Seed” aborda las consecuencias de la colonización, la erradicación de la cultura y la pérdida del patrimonio, al tiempo que recupera las prácticas agrícolas tradicionales en un acto de resistencia”.
Añadió que “Es un proyecto muy potente que aborda un tema de preocupación mundial desde el punto de vista personal. Tras investigar sus propias raíces, la fotógrafa indaga en la violenta y estratégica supresión del conocimiento cultural y las profundas repercusiones que esto tiene en las nuevas generaciones, las sociedades y el planeta mismo”.
La ganadora informó a la agencia española Efe que para elaborar “La sangre es una semilla” trabajó con la comunidad de Camuendo Chico, provincia de Imbabura, para instar a “volcar la mirada otras formas de conocimiento” y a crear un “un puente” entre la labor que hace la ciencia y las comunidades indígenas”.
Además, viajó al pueblo ancestral de su padre en Cundinamarca- Colombia, donde exploró recuerdos olvidados de la tierra y los cultivos, sobre su abuelo y bisabuela, quienes fueron “guardianes de semillas” y cultivaron varias variedades de papas.
OTROS PREMIADOS
La fotografía de Amber Bracken fue también reconocida, esta capta imágenes de vestidos rojos colgados en una carretera de Canadá, en recuerdo a 215 niños indígenas, cuyos restos fueron localizados en tumbas sin marcar, de una antigua residencia escolar, localizada en Kamloops, regentada por la iglesia católica.
El Reportaje del Año se le adjudicó a una imagen capturada por el australiano Matthew Abbott, publicado en National Geographic y que reivindica una práctica milenaria de los indígenas australianos.
El brasileño Lalo Almeida fue el ganador del Premio al Proyecto a Largo Plazo con su trabajo Distopía Amazónica. A través de este proyecto el fotógrafo pudo profundizar en los efectos sociales, políticos y ambientales de la deforestación, minería y la explotación de recursos en la Amazonía brasileña.
A Isadora Romero, le hacemos llegar nuestras cálidas y sinceras felicitaciones por su trabajo de excelencia, que llevó el nombre de Ecuador a la cima del mundo fotográfico.