(San Juan, P.R.) Pedro R. Pierluisi Urrutia permanecerá como gobernador de Puerto Rico hasta que el Tribunal Supremo determine si la ley que utilizó para llegar a La Fortaleza es constitucional. Militantes del partido de la mayoría, Partido Nuevo Progresista, esperaban que los senadores avalaran el nombramiento del Gobernador hoy, pero el Senado se negó a considerar la nominación de Pierluisi como secretario de Estado.
«Siendo esta sesión extraordinaria convocada para atender un nombramiento, si no se atiende ese nombramiento, lo que equivale a que lo rechazamos», puntualizó el presidente del Senado, Tomás Rivera Schatz, durante su alocución ante el cuerpo legislativo.
Pierluisi Urrutia no presentó la documentación requerida por la Comisión de Nominaciones para cualquier nombramiento, dijo Rivera Schatz. Señaló además el presidente que, Pierluisi Urrutia no cuenta con los votos en el cuerpo para avalar el nombramiento.
El gobernador reaccionó a la decisión del Senado indicando que esperará a la decisión del Tribunal Supremo.
“En mi vida siempre he actuado de buena fe y conforme a la ley y el orden. Esta no es la excepción. Sigo con la mejor disposición de servirle a mi pueblo en estos momentos tan difíciles en los que todos reclamamos paz y estabilidad”, dijo el gobernante en expresiones escritas.
“Reconozco que el Senado de Puerto Rico ha iniciado un pleito judicial para impugnar mi juramento como gobernador y que ahora busca que el Tribunal Supremo de Puerto Rico resuelva la controversia”.
“En vista de que el Senado no hizo votación alguna y de que la gran mayoría de los senadores no tuvieron la oportunidad de expresarse en cuanto a mi incumbencia, con la mayor deferencia al Tribunal Supremo de Puerto Rico, esperaré su decisión confiado en que prevalecerá lo mejor para Puerto Rico”.
“El Pueblo puede estar tranquilo que me ocuparé de que el gobierno siga cumpliendo su misión sin interrupción o dilación», concluyó Pierluisi Urrutia.
La decisión final sobre quién regirá los destinos del Archipiélago Borincano están ahora en las manos de los nueve jueces del Tribunal Supremo, que en su mayoría están asociados al PNP. Los magistrados son: la jueza Maité Oronoz Rodríguez, quien preside el Tribunal Supremo y los jueces asociados, Anabel Rodríguez Rodríguez, Rafael Martínez Torres, Mildred Pabón Charneco, Erick Kolthoff Caraballo, Edgardo Rivera García, Riberto Filiberti Cintrón, Luis Estrella Martínez y Ángel Colón Pérez.
El Tribunal Supremo ordenó que “ante la premura de lo planteado en la solicitud de certificación, se acorta hasta mañana, martes 6 de agosto de 2019 a las 12:00 del mediodía, el plazo para que todas las partes presenten sus alegatos de forma simultánea”.
“En ese mismo plazo, la parte peticionaria deberá acreditar fehacientemente que notificó el recurso al procurador general. No se concederán prórrogas”, agregó la comunicación escrita del Supremo.
Los jueces pueden emitir tres decisiones.
“El Tribunal Supremo puede declarar que la Ley 7, según enmendada, es inconstitucional, lo que convertiría a la secretaria de Estado, Wanda Vázquez Garced, en gobernadora”, dijo el analista político Carlos Dalmau. “Se puede dar también el caso que el Supremo le devuelva el asunto al Senado para que evalúe la nominación de Pierluisi Urrutia como secretario de Estado. Un tercer escenario sería que el Tribunal acepte la gobernanza de Pierluisi, aunque declare la ley inconstitucional porque estaba vigente cuando él juramentó como gobernador”.
Para el analista Carlos Díaz Olivo la actitud del Senado fue “cobarde”.
“El Senado debió votar sobre la nominación de Pierluisi y terminar con esta situación. No hacerlo es un acto cobarde”, expresó Díaz Olivo.
Por su parte, el analista Luis Dávila Colón aseguró que el PNP va camino a su extinción.
“Esta crisis constitucional es solo la antesala de la extinción del PNP. En las próximas elecciones lo veremos. Deja un legado positivo, pero tristemente la gente ya no es PNP, ni sigue el ideal, son seguidores de hombres. Son rossellistas, carlistas, pierluisistas, pero no creen en el partido”, expuso el reconocido analista estadista.
“Esta situación lastimará a Pierluisi, porque de quedarse siempre se verá marcado por la ilegalidad. Tomás (Rivera Schatz) ya no le interesa la gobernación porque sabe el costo que tendrá que pagar por defender la Constitución”.
“La Constitución es la ley del Estado Libre Asociado y cuando seamos estado, será la ley del estado de Puerto Rico”, añadió.
La permanencia de Pierluisi en la gobernación se ha convertido en objeto de división entre las filas del PNP, que aboga por la unión a los Estados Unidos. Los que se oponen a su nombramiento señalan su asociación a la oligarquía económica colonial, que fue abogado de la Junta de Supervisión Fiscal y que ha defendido a los famosos buitres que han desgarrado la economía de la colonia más antigua del planeta.
Rivera Schatz ha sido duramente atacado por las huestes del PNP, colectividad que presidente. En su alocución en el Senado, el presidente indicó que esas eran tácticas similares a las utilizadas por KOI, la agencia de relaciones públicas que presidente Edwin Miranda, amigo de Ricardo Rosselló Nevares.
“El PNP está en crisis. Existe una campaña de odio orquestada por los seguidores de Rosselló contra Rivera Schatz, porque lo culpan de la caída del primer gobernador que renuncia en la Isla bajo el Estado Libre Asociado”, dijo José Vélez de Manatí.
“No ven las faltas de Rosselló, ni el daño que su soberbia le ha causado al país. Destruyó la imagen del país en Washington, dividió el partido y desarticuló la base, el partido no tiene ni una sede”, añadió.
“El fanatismo es mal consejero. Estamos viviendo las consecuencias de la ceguera de los fanáticos que se negaron a condenar la corrupción, justificaron los ataques de los “chatistas” y apoyaron la ineptitud gubernamental”.
“Ese mismo fanatismo les lleva a masacrarse entre ellos mismos. Controlan las tres ramas gubernamentales, ya no pueden culpar a los populares (Partido Popular Democrático). Salen más divididos y mal parados de todo esto”, concluyó.
Los puertorriqueños esperan que el Supremo emita una decisión sobre la gobernanza de Pierluisi esta semana.
“No podemos continuar sin un gobierno estable. La economía ha sido duramente golpeada, la gente está cansada y desea volver a la normalidad”, aseguró María Fernández de Corozal.