Nueva York. Es sumamente asombroso en una familia peruano-estadounidense, ver a uno de sus miembros cumplir un siglo o más de vida con alegría, en el calor del hogar y con desbordante amor.
El doctor Dagoberto Camacho Castro, residente en el condado de Hudson, New Jersey, acaba de celebrar 102 años de vida, rodeado por sus queridos hijos, nietos y amigos cercanos.
Hasta un “arriba Perú”, exclamó el galeno nacido en Cajamarca, al momento del brindis y recibir los abrazos de sus hijos.
Su historia es la de los profesionales médicos que por entero han dedicado varias décadas de su vida en atender a sus pacientes en su propio país para luego compartir sus experiencias en New Jersey, como caso del doctor Camacho, quien se ganó el aprecio de la comunidad latina al prestar sus servicios en Jersey City Medical Center y en el Occupational Community Health Services en Union City, entre otros.
Viaje a los Estados Unidos
Sus estudios preparatorios los realizó en Lima en la escuela Virgen de Guadalupe. Se graduó como médico cirujano de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Luego realizó varios estudios como el caso de la tuberculosis en los huesos, que le valió para posteriores estudios.
Alrededor del año 1960, el doctor Camacho viajó de Lima a los Estados Unidos tras ganar una beca para realizar su residencia médica en la especialidad de traumatología en el Centro de Emergencia de Jersey City Medical Center. Como parte del adiestramiento, en esos tiempos los médicos debían acudir en las ambulancias, y de esa manera participó en múltiples hazañas de rescate de los pacientes, en los vecindarios de Weehawken, donde anteriormente funcionaba el hospital North Hudson en Park Avenue. Este hospital fue reemplazado por el Palisades Hospital en Edgewater, y el Jersey City Medical Center se mudó a otro lugar de esta ciudad. Ambos hospitales fueron transformados en centros de condominios residenciales.
Mientras el doctor Camacho realizaba su residencia, conoció a la dama estadounidense Eileen Walsh, quien le ayudaba a practicar el idioma inglés. Ella era la prima de Rose Mary Kelly, enfermera del mencionado hospital.
Dado el mutuo amor a su país de origen, el doctor Camacho introdujo a Eileen Walsh a su madre, Mercedes Castro Viuda de Camacho, también maestra en Perú, y directora de la escuela Montessori en Cajamarca y en Lima.
Al término de su residencia en Jersey City en 1962, el doctor Camacho y Eileen Walsh, retornaron al Perú para realizar misiones médicas de buena voluntad a Cerro de Pasco, y la selva peruana, atendiendo a los mineros con enfermedades y personas sin recursos de salud.
Matrimonio Camacho- Walsh
Ese mismo año, el doctor Camacho contrae matrimonio en Lima con su prometida Eileen Walsh, de origen irlandés, quien aprendió con rapidez el idioma castellano, al mismo tiempo impartía cursos de inglés a profesionales del Ministerio de Economía y Finanzas, Universidad Católica y el Instituto Peruano Norteamericano.
Estando en Lima, el doctor Camacho volvió a la práctica médica, realizando turnos en el hospital San José y enseñaba en la Universidad Mayor de San Marcos lo mismo que en la escuela secundaria Hipólito Unanue. Luego, fue nombrado jefe de Sanidad Internacional del Aeropuerto Jorge Chávez. Al caminar por todo el aeropuerto, el doctor Camacho era muy conocido por los periodistas que cubrían informaciones.
En medio de sus actividades profesionales, esta pareja con herencia bicultural formó cinco nuevas vidas: Gregory José, Brian Dagoberto, Mercedes Elena (Helen), John Francisco y David Martín. Sus nietos son: Gabriel Alfredo y Brian Martín, hijos de Gregory (Pepe); Mercedes y Brian Joseph, hijos de Brian; Ellen Mercedes Daghmara, hija de Mercedes, y Martin y Joaquín, este último de 4 años, hijos de David.
Retorno a los Estados Unidos
El doctor Camacho, decidió retornar a los Estados Unidos junto con su familia, escogiendo el estado de New Jersey como su futuro hogar, donde sus hijos alcanzaron logros profesionales: Gregory y Brian siguieron ingeniería, David, fotografía, y Mercedes su doctorado en enfermería. John, alegra con sus canciones y los recuerdos de infancia en los años que vivieron en suelo peruano.
Lamentablemente, su esposa Eileen, falleció en 2005 a causa de una severa enfermedad.
Luego de jubilarse, el doctor Camacho fundó la organización de Profesionales y negociantes del Estado de Nueva Jersey, y logró obtener recursos para realizar misiones médicas a los pueblos afectados por la Corriente del Niño, en los años 80, viajando a varias ciudades afectadas junto con sus hijos.
El pasado 15 de junio, fecha de su natalicio, el doctor Camacho se sintió muy animado. Sus hijos nos cuentan que mantiene la alegría, la calma, el buen trato y paciencia para todos. En su práctica médica, todos lo recuerdan con su sonrisa y sencillez, al reflejar respeto, gratitud, cariño, y amabilidad genuina, y algo muy importante cuando solía decir: ¡no te dejes apurar!
Sólo, nos ha faltado preguntar al doctor Camacho su fórmula de cómo superar los cien años de edad.
