Sydney, Australia, es punto de embarque y desembarque de muchos cruceros a Australia y Nueva Zelanda, al igual que escala popular en viajes alrededor del mundo y otros grandes cruceros. Cuenta con uno de los puertos más grandes y pintorescos del mundo –está en la misma liga que los puertos de Río de Janeiro, Hong Kong y Singapur. Sin dudas, uno de los puertos naturales mejores del planeta –su nombre oficial es Puerto Jackson – ofrece vistas icónicas de clase mundial incluyendo la Casa de la Opera y el Puente del Puerto.
La mayoría de los pasajeros de cruceros suben a las cubiertas superiores de sus barcos para ver la entrada a la ciudad –no importa cuán temprano suceda—para ver los paisajes de la ciudad con sus modernos rascacielos y los panoramas del mar, con veleros y trasbordadores en el puerto.
Nuestro barco, el Amsterdam de Holland America ahora en su vuelta al mundo anual, sirvió café, jugo y panecillos dulces para los pasajeros que prefirieron no ir a desayunar al comedor para no perderse la entrada al puerto.
Una manera conveniente de orientarse y llegar a varios puntos de interés es por medio del autobús turístico Big Bus que permite bajar en atracciones y volver a subir para continuar el recorrido –una de las paradas es en el muelle Circular Quay donde muchos cruceros paran y desde donde se puede tomar botes turísticos al zoológico Taronga y otras atracciones.
Que ver en Sydney:
Quizás el punto más icónico de Sydney es la Casa de la Opera con su arquitectura modernística que da la impresión de ser grandes velas en el Puerto. Uno de los edificios más interesantes del Siglo XX y Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, la Casa de la Opera presenta unos 2,500 eventos cada año, según la Oficina de Turismo de Sydney. Diseñada por el arquitecto danés Jorn Utzon, tiene 10 techos con tejas blancas que brillan en el sol– el más alto está a 221 pies sobre el nivel del mar. La Casa de la Opera cuenta con varias salas y teatros para conciertos, opera, ballet comedias y más. Se completó en el 1973 y la Reina Isabel II la inauguró. Se ofrecen paseos por el interior del recinto y muchos cruceros organizan excursiones para ver un espectáculo y disfrutar de su soberbia acústica.
Otro punto espectacular que se disfruta ya desde el crucero al llegar a Sydney es el Puente del Puerto, también llamado cariñosamente “El Perchero” por la gente local. Inaugurado en el 1932 es el puente más ancho y largo del mundo y el más alto arco de acero con una altura de 429.6 pies sobre el mar. Los visitantes pueden cruzarlo a pie y los intrépidos pueden optar por un tur para escalarlo – hay cientos de escalones y se requiere vestuario especial suministrado y un test para estar seguro que no se han tomado bebidas alcohólicas. Muchos cruceros ofrecen esta experiencia como un tur opcional.
Una atracción ideal para familias es el zoológico Taronga Park Zoo. Aquí grandes y chicos pueden ver y sacar fotos a canguros, koalas y otros miembros de la fabulosa fauna de Australia. También hay oportunidades de posar para fotos con animales, visitar un acuario con focas, leones marinos y pingüinos, al igual que peces y otras criaturas marinas. Se puede tomar un trasbordador desde el Circular Quay al zoológico.
Otros puntos de interés incluyen la torre Sydney Tower, la estructura más alta de la ciudad con una altura de 1,014 pies. Parece salida de un libro de ciencia-ficción y abrió en el 1981. Una atracción de Merlin Entertainments (la misma compañía que nos trajo, entre otras atracciones el Orlando Eye y el London Eye), ofrece vistas panóramicas de Sydney y sus alrededores. Los jardines botánicos, Royal Botanical Garden, son bellos, con abundancia de plantas locales y exóticas, paseos guiados, experiencias aborígenes, vistas de la Casa de la Opera y más. Una esplanada al sur del Circular Quay lleva al jardín (esta esplanada lleva a la Casa de la Opera también y otra al norte del Circular Quay lleva al Puente de Sydney).
Un barrio de Sydney que merita una visita es The Rocks (Las Rocas) y tiene contenido histórico, pues fue aquí que se asentaron los convictos deportados de Inglaterra en el Siglo XVIII, estableciendo el primer poblado en Australia. Tiene calles de adoquines, interesante arquitectura, antiguos bares, museos, galerías de arte, restaurantes y cafés, tiendas y boutiques.
Dos playas populares son Bondi, un suburbio de Sydney, que tiene buen oleaje lo cual la hace popular entre los entusiastas del deporte de tabla, y Manly, a siete millas de Sydney.
Una buena excursión de todo un día es a las Montañas Azules, así llamadas pues en ciertas luces tienen aspecto azuloso. Son Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y cuentan con formaciones rocosas y bosques de eucalipto.
SI USTED VA – Para informes, visite www.sydney.com.