La práctica del yoga existe desde hace miles de años, pero ¿se han dado cuenta de que está de moda?, ¿qué están pululando por todos lados nuevos estudios que viven llenos de practicantes? Y también, ¿han notado que pareciera que la mayoría de las personas que lo prueban quedan enganchadas, con ganas de más y recomendándolo a todo el mundo? En vista de eso, hace poco me aventuré a practicarlo y ¡lo recomiendo!, especialmente porque me di cuenta de que tiene unos beneficios espectaculares para nosotras, las “cuarentonas”. Y ya saben que yo siempre estoy en la búsqueda de todo lo nos haga más felices para contárselo a ustedes.
- El yoga no es solo una práctica física, sino también espiritual: no es necesario pertenecer a una religión específica, pero, si estás buscando conectarte con una fuerza superior y con tu verdadero ser, si buscas paz interior, esto puede ser justo lo que necesitas. Ejercitas tu cuerpo, tus emociones y tu espíritu a la vez. ¿Sabías que las personas espirituales sanan más rápido y mejor? ¿Sabías que las personas espirituales se sienten más satisfechas en general con sus vidas?
- El yoga nos ayuda a aliviar los síntomas de la menopausia: algunas investigaciones indican que la práctica del yoga ayuda a disminuir los sofocos, aumenta el deseo sexual, mejora el estado de ánimo y controla el apetito, ya que relaja el sistema nervioso y mejora el funcionamiento del sistema endocrino, ayudando al cuerpo a adaptarse a los cambios hormonales. Si deseas una forma más natural de lidiar con estos incómodos síntomas, o si necesitas algo que complemente tu terapia o medicamento actual, entonces dale una oportunidad al yoga.
- El yoga mejora la postura, aumenta la flexibilidad y el equilibrio: en mis publicaciones en las redes sociales y en mi programa transformador de 21 días #Los40sonlosnuevos20, hago mucho hincapié en la necesidad de mejorar nuestra postura y flexibilidad. Con la osteopenia y osteoporosis tocándonos la puerta, es fundamental fortalecer nuestros huesos para prevenir las fracturas, y nuestros músculos y articulaciones. Todos esos son beneficios bien conocidos y documentados del yoga, entre muchos otros.
Hay una gran variedad de tipos de yoga. Lo importante es que te animes a probar algunos hasta que encuentres el que mejor se adapta a lo que te gusta y necesitas.
