El envejecimiento es un proceso natural que es imposible detener por completo. Sin embargo, hay ciertas medidas que podemos adoptar para ralentizarlo y retrasarlo y tener una salud óptima por la mayor cantidad de tiempo posible. No se trata solo de vivir más tiempo, sino de hacerlo con calidad de vida, salud y la mejor imagen posible.
Aquí te presento los mejores consejos para combatir el envejecimiento:
Evitar el estrés: este puede que sea el principal factor que nos hace envejecer de forma prematura. El estrés crónico hace que nuestro cuerpo libere ciertos elementos, llamados radicales libres que, en grandes cantidades, dañan nuestras células sanas. Este daño ha sido relacionado con varias enfermedades que cada vez se hacen más comunes, como ciertos tipos de cáncer, enfermedad cardiovascular, diabetes y afecciones neurodegenerativas como el Alzheimer. Entonces, consejo número uno, hay que impedir que el estrés controle nuestras vidas. Para ello hay técnicas de relajación, meditación, respiración y un sinfín de otras estrategias anti-estrés que se pueden implementar.
Alimentarte bien: ya hemos visto que los radicales libres son una de las principales causas de envejecimiento y enfermedad. Otra forma de mantener estos elementos dañinos a raya es consumir alimentos ricos en antioxidantes. Los antioxidantes son las sustancias que contrarrestan y neutralizan los radicales libres. Entre los mejores alimentos anti-envejecimiento se encuentran el chocolate oscuro (¡una buena noticia para los amantes del chocolate!), el té y el café (moderadamente), las frutas y las verduras (como el kiwi, el aguacate, la sandía), las nueces, los condimentos canela y orégano, el hígado, el salmón y los frijoles (especialmente los pintos y los rojos).
Hacer ejercicio y mantenerte activo: el ejercicio y la actividad tiene una función doble en el anti-envejecimiento. Por un lado, ayudan a controlar el estrés y la ansiedad (que producen radicales libres) y, por el otro, tonifican y fortalecen los músculos, las articulaciones, ¡y los huesos! Hay que prestar mucha atención a los huesos mientras vamos madurando, ya que es normal que vayamos perdiendo densidad ósea con los años y los cambios hormonales como la menopausia (la osteopenia y la osteoporosis son enfermedades silenciosas, pero pueden ser letales). Sin embargo, es primordial evitar las caídas y las fracturas, ya que ellas son una gran causa de discapacidad en la actualidad.
Por último, pero no menos importante, están los siguientes aspectos: limitar el alcohol, no fumar, vigilar y mantener un peso saludable, dormir lo suficiente y tener un sueño de calidad, cuidar la piel y una cosa que siempre me gusta recalcar: pensar como joven, con positivismo, con esperanza y alegría, rodearte de gente querida, ya que ese dicho que todos conocemos —“todo es cuestión de actitud”— se aplica perfectamente en el anti-envejecimiento.
@PosadaLifeCoach