El día 3 de noviembre 2021 El Capitolio de Puerto Rico vibró a son de Golpe de Bomba para honrar la trayectoria de la Familia Cepeda-Brenes en el Centenario Fundación Cultural Rafael Cepeda.
En esta celebración se distinguió el legado de la gran familia Cepeda a lo que se le conoce como: “la Bomba de los Cepeda.”
Los Cepeda y sus ancestros son baluartes de Puerto Rico y su cultura. Son una familia que por generaciones han sabido inculcar y educar sobre el valor de la música de Bomba y Plena distinguiendo siempre el orgullo que sienten de sus raíces africanas.
La bomba es el género de canto y baile más antiguo de Puerto Rico. Según la tradición tiene más de cuatrocientos años y nació con los hijos de los esclavos y negros libres. Los esclavos y los negros libres bailaban imitando a su manera afro-puertorriqueña los bailes populares y la música a su alrededor.
La bomba es originaria de Puerto Rico, principalmente en zonas costeras con mayor concentración de esclavos. Los pueblos de Mayaguez, Cangrejos (Santurce), Loiza , Ponce ,Guayama, Santa Isabel y Juana Diaz entre otros, fueron la cuna de los varios estilos que conforman la bomba puertorriqueña.
En palabras de don Jesùs Cepeda Brenes: “Este legado seguirá plasmado para la eternidad. Somos y seguiremos siendo La familia embajadora de la bomba y la Plena Puertorriqueña.”
Mayagüez y el àrea oeste estuvo muy bien representada con la figura de la profesora y bailaora de Bomba Jamie Pérez en la Fiesta de la Puertorriqueñidad que promueve el Programa de Estudios Sociales del Departamento de Educación de Puerto Rico.
La Sra. Tata Cepeda y Jamie Pérez están consideradas como dos de las mejores damas exponentes de la Bomba puertorriqueña.
“La Gran Dama de la Bomba”Jamie Pèrez expresó: “Cuando los tambores reciben su reconocimiento, su eco traspasa fuertes cimientos para conectar con su raíz (tierra), cuando se da este hermoso manifiesto, no hay alma que no mueva un pie. África reclama a sus hijos/hijas/hijes y es el tambor Madre quién nos recuerda los siglos de historia que transitan en nuestras vidas.”
Nuevamente en el Capitolio de Puerto Rico sonaron los tambores que marcan el orgullo de nuestra puertorriqueñidad.
En palabras de Don Rafael Cepeda: “Cuando Puerto Rico comprenda el valor de su folklore, luchará con mucha fuerza para defender su honor.”
