Como acto de magia ha surgido la aprobación de una ley para aumentarles el retiro a los alcaldes de un 75% a un 90% porciento de su sueldo por treinta años. No tan solo no se pasó la ley por el Senado de Puerto Rico durante la madrugada, sino que tampoco se debatió la medida. Como decimos en Puerto Rico, eso fue Friendo y Comiendo. Todos los alcaldes salieron satisfechos de tal acción legislativa porque les da un 90 % de su sueldo cuando se retiren con ocho años de servicio. Muchos de ellos se han subido el sueldo el último año de servicio para irse con una pensión mayor sin haber trabajado con ese salario por mucho tiempo.
La medida dispone que se le compute la pensión de acuerdo al artículo 2-101(b) de la ley 447-1951, según enmendada, que establece un sistema de beneficio definido, en lugar de que se le aplique el sistema de aportación en cuentas de ahorro dispuesto para los empleados públicos a partir del año 2000.
La Cámara de Representantes verá la ley en enero del 2019 para respaldar la medida y enviarla al gobernador para su aprobación. El gobernador Ricardo Reselló públicamente ha dicho que no respalda dicha ley debido a la condición de crisis fiscal de la isla.
También se ha pasado otra ley que autoriza al alcalde nombrar su sucesor (su hijo, su hija, la chilla, el chillo,) sin tener que ir a unas elecciones primarias. O sea, el alcalde que se va a retirar, solo apunta con el dedo el que quiera proponer y ese será nombrado.
En el P.del S.1133, presentado por el presidente Thomas Rivera Schatz y aprobado por el Senado, se propone enmendar el Código Electoral de Puerto Rico así como la Ley de Municipios Autónomos (Ley 81-1991, según enmendada), en la que establece el requisito de seleccionar las «estructuras municipales en elecciones generales», para que el partido pueda elegir a un funcionario sucesor.
Tal parece que la democracia se sigue reduciendo en Puerto Rico donde se quita el derecho a los ciudadanos de elegir a su alcalde.
En un momento tan crítico para Puerto Rico donde a los pobres empleados públicos como maestros, policías, profesores universitarios, empleados de las corporaciones públicas se le van a cortar las pensiones por orden de la Junta de Control Fiscal, se puede apreciar que los alcaldes no desean ser tratados como empleados públicos cuando en realidad lo son.
Mientras el resto del pueblo tiene que trabajar por treinta (30) años para recibir una pequeña pensión de hambre la cual será reducida para pagar prestamos billonarios del gobierno, que no fueron autorizados por el pueblo, los alcaldes están pidiendo estos aumentos a su retiro cuando podemos apreciar calles rotas, postes de alumbrado aun sin repararse, autopistas con rotos, problemas con en el sistema eléctrico, el desempleo más alto en la historia de la isla, aumento en la matricula de la UPR, problemas con la autoridad de acueductos y su cumplimiento con la ley federal de calidad de agua, con todos los vertederos municipales a ley de ser cerrados.
Todo esto de los aumentos al retiro de los alcaldes se debe a una pugna interna dentro del partido en el poder para hacer quedar mal al gobernador con sus alcaldes cuando tenga que desaprobar estas leyes. O sea, el gobernador se va a tirar a los alcaldes de enemigos y como consecuencia de este acto de rechazo al aumento, no tendrá el respaldo de ellos si viene una primaria para las elecciones del 2020.
Este artículo es para que despierten y vean como los políticos de Puerto Rico siguen buscando el acomodo razonable para quitarle el poco dinero que queda a los habitantes de la isla.
Hace falta una nueva sepa de políticos sin compromiso de partidos. Hacen falta personas que su integridad no este prostituida o comprometida con los grandes intereses. También hay que limitar el tiempo a todos los legisladores y alcaldes. Esto solo se consigue si la gente despierta y elige personas nuevas e independientes que no pertenezcan a ningún partido para el 2020.
