Ingredientes:
1 Paquete de Pasta cocida
2 Unidades de Tomates
1 Unidades de Zanahoria
Lechuga
1 Unidades de Pimiento rojo
1 Unidades de Cebolla
1 Unidades de Pimiento verde
3 Loncha de Jamón
4 Loncha de Pavo
1 Cuña de Queso pequeña
1 Tarro de Pepinillos en vinagre
1 Tarro de Olivas negras
1 Chorro de Aceite de oliva
1 Chorro de Vinagre de manzana
- Pizca de Sal
Preparación:
Las cantidades de los ingredientes no son exactas, ya que cada cocinero puede añadir o reducir como quiera los productos. Empezamos cocinando la pasta. Para ello, poner una cazuela con abundante agua al fuego. Añade un chorrito de aceite y una pizca de sal.
Cuando empiece a hervir añadimos la pasta. Si en el paquete dice que dejemos la pasta cocer durante 10 minutos, la dejamos 8. Cuando rompa de nuevo a hervir, bajamos el fuego y dejamos cocer. Una vez cocida (debe quedar al dente), la escurrimos, la pasamos por agua fría, volvemos a escurrir y reservamos. Ha llegado el turno de picar el resto de ingredientes. Pela y pica finamente los tomates, la zanahoria, pimientos, cebolla y pepinillos. Corta en cuadros o tiras finas el jamón, el pavo, el queso y la lechuga.
Mezclamos poco a poco los ingredientes picados y cortados con la pasta. Removemos bien para conseguir que quede todo bien distribuido y no se acumule en el fondo de la fuente. Aliñamos con aceite, vinagre de manzana y sal al gusto. Volvemos a mezclar y reservamos la ensalada de verano en la nevera. Al momento de servirla usaremos un aro de emplatar. Lo colocamos en el plato, introducimos un poco de ensalada, decoramos con olivas negras y damos un último toque de aceite y vinagre.
Retiramos el aro y listo, quedarás como el perfecto anfitrión con una receta sencilla, nutritiva, refrescante y, sobre todo, deliciosa.
