Velda participó en la primera novela puertorriqueña, “Yo no quiero vivir” haciendo pareja con Walter Mercado
Hace apenas algunos días tuvimos el privilegio de conversar amigablemente con la actriz y ex senadora Velda González quien nos trasladó a sus comienzos en la época gloriosa de la televisión puertorriqueña y a la década del setenta cuando llegó a Nueva York para los inicios del Canal 47 WNJU TV, hasta el presente donde todavía laboraba parte del tiempo como legisladora ciudadana en el Municipio de Carolina.
Ella fue una mujer que siempre luchó en pro de los más necesitados, los derechos humanos, envejecientes, la familia y la cultura puertorriqueña. No solamente se distinguió en el ámbito local, sino también en radio, cine, teatro y la televisión extranjera.
Reflexionando sobre el final de la entrevista me pareció que nuestra querida artista y gran ser humano, que alcanzó el respeto y cariño del público presentía su final.
Decía ella: “Todavía me queda mucho que hacer, a veces pienso escribir un libro pero escribirlo yo. A pesar que existen correctores y escritores prefiero contar las cosas como las digo y no como ellos las piensan y las dicen. Creo que mi hija Mirelsa, quien es escritora y profesora de la Universidad del Sagrado Corazón, me podría ayudar mucho. Ella además posee un doctorado en psicología clínica y ha escrito varias obras infantiles.
“A la hora de mi partida de este mundo terrenal lo único que pediría seria que elevaran una oración por mi descanso eterno”.
-“Comencé mi carrera profesional bailando y en la actuación dramática. Había estudiado teatro en la Universidad de Puerto Rico donde obtuve el bachillerato en humanidades con una concentración en estudios hispánicos y teatro. Tuve la oportunidad de actuar en la primera novela que se hizo en Puerto Rico titulada “Yo no pedí vivir”, escrita por Celia Alcántara. Haciendo pareja con Walter Mercado ya que ambos éramos bailarines y actores dramáticos”.
Sobre su inolvidable personaje de Azucena del Campo y Castillo en la “Criada Malcriada” que la dio a conocer en televisión y cine, aseguró que fue creado por Don Tommy Muñiz, (QPD) para un programa de radio que se titulaba “Violeta Flores, que sirvienta”. Al surgir la oportunidad para televisión fue adaptada a una jíbara puertorriqueña.
“Comencé imitándola por 15 minutos todos los días en el Show de las 12, que se trasmitía al mediodía. A esa hora los muchachos llegaban de la escuela para almorzar y sintonizaban el programa, razón por la que hoy en día tengo papás y abuelos que me escuchaban diariamente. Estuve 10 años en la televisión y también con un poco de cambio de formato con “La criada a la orden”.
-Lo que más disfruto es hacer reír a la gente, impartirle felicidad, verlos divirtiéndose porque la vida es brutal y si no es por esos ratitos de expansión. Es algo que desde pequeña me sale natural”.
-¿Cómo conoce a Don Héctor Modesti, quien luego se convertiría en su esposo?
Apenas contaba con 23 años cuando comencé en WAPA en donde él se desempeñaba como vendedor. Yo bailaba ballet con Walter Mercado, luego bailes internacionales y fui parte de “Las India Girl”.
SU TRASLADO A ESTADOS UNIDOS
Usted es muy querida en la ciudad de Nueva York y áreas limítrofes. ¿Cómo fue esa transición de WAPA al Canal 47?
-Creo que para el 1970 fue cuando WAPA adquirió el Canal 47, sus estudios estaban localizados en Newark. Modesti era gerente general de WAPA y Vicepresidente de Columbia Pictures, la cual incluía a WAPA TV, un canal en New Orleans y al Canal 47, formando así la red de los tres canales. Y fue enviado a dirigir el nuevo canal.
Para esa época la mayoría de los latinos en los tres estados, (Nueva York, New Jersey y Connecticut), incluyendo Filadelfia eran puertorriqueños. debido a eso y para echar adelante el Canal 47, se trajo la programación que se originaba en WAPA, es ahí donde llegan los programas de Myrta Silva, Criada a la Orden, Bobby Capó, Gazpar Pumarejo, Luis Vigoreaux Presenta, Vilma y Tony y muchísimos más. Para reforzar la programación también escoge y adquiere los mejores programas del canal 2 que tenía Paquito Cordero. Con ellos les traía nostalgia a los puertorriqueños residentes en esas áreas.
-Cuando México le ofrece hacer cine, prefirió llegar a Estados Unidos a un canal nuevo que no sabía si funcionaría, declinando tan tentadora oferta. ¿A qué se debió?
-Modesti siempre me apoyó en mi carrera pero cuando lo trasladan a Estados Unidos era natural que tuviera que estar con él y mis tres hijos. De ninguna manera podía estar haciendo cine y viviendo en México con mi familia en otro lado. Sacrifiqué parte de mi carrera pero por otro lado me daba mucha satisfacción el contacto con mi gente en teatros, espectáculos, televisión.
A pesar de que existía un poco la diversidad racial en esos momentos, entramos en contacto con el público de otros países que gustaron de nuestra programación. La película “La Criada Malcriada” la llevamos a Chicago, en su mayoría mexicanos y fue tan bien recibida que rompió el récord a la película de Cantinflas.
-¿La lección mayor aprendida en todos estos años de carrera?
-Aprendo todos los días de las personas, la que menos crees te puede enseñar. De la juventud actual he aprendido mucho porque es abierta al dialogo, no tiene prejuicio, no discrimina, recibe a todas las nacionalidades, razas, orientaciones sexuales. Me llena de satisfacción porque yo tampoco he tenido prejuicios con nadie.
-Hay temas que no se abordan en el cine o teatro, ¿cuáles crees se deban abordar?
-Por medio del teatro y la televisión podemos mejorar la sociedad. Al arte hay que darle utilidad, por medio de ello se puede anticipar, alertar y mejorar la sociedad. Temas de problemas actuales, que alerten. Hay muchos que afectan a la sociedad y hay que tratarlos. Entrelazar ese contenido con historias de romance, hacer que el público sueñe pero a la misma vez aprenda.
-¿Cómo ve el futuro de las actrices hispanas en Puerto Rico?
-Lamentablemente en Puerto Rico casi no hay trabajo para los actores que no sea en teatro. Cuando estuve en el senado ayudé a las compañías teatrales a fomentar constantemente las obras. En la actualidad se están presentando todos los fines de semana porque lamentablemente la televisión tiene muy poca programación local, todo llega de afuera. A excepción de Raymond Arrieta en el Canal 2 que viene siendo NBC, los de WAPA al mediodía y alguno en la tarde. En Puerto Rico ya no se producen novelas, no hay talleres dramáticos como antes. Las telenovelas vienen de México, Colombia, Brasil, nada producido aquí.
-¿Cómo ve la televisión de hoy en día?
-No veo mucha televisión. Las comedias son vulgares, chabacanas, de doble sentido, mucha grosería. Para hacer reír no se necesitan esas cosas.
POLÍTICA Y CRISIS
-¿Cuándo decide entrar de lleno a la política?
-Por muchos años siempre me habían hecho el acercamiento para participar pero les decía que era artista y no política. Los partidos saben que los artistas tenemos ganchos y ellos quieren el triunfo, sobre todo lo que corren por acumulación.
-¿Cuándo gana las elecciones?
-En la Campaña del 80. Tuve que pelear ese escaño contra Ruth Fernández que ya era senadora. Fueron unas primarias difíciles porque ella era muy querida y respetada por todos, además tenía la virtud del don de la palabra. Yo sabía hablar con un libreto al frente pero no improvisar o hablar cosas tan serias como del estatus. Ella siempre se presentaba primero y hablaba muy elocuente. Cuando me tocaba el turno hablaba como mi personaje “Azucena”
-¿Qué seria primordial para rescatar al país de la crisis?
-Esto es muy personal, es mi forma de ver las cosas. Lo más importante y saludable para el pueblo es que estos cambios cada cuatro años no son recomendables. Hay que dar tiempo para que las cosas arranquen y prendan. Alejandro lleva cuatro años y heredó unos déficit mucho más grande del conocimiento del pueblo. Con todo y eso ha estado tratando de enderezar el país pero no es suficiente. Hay que dar tiempo o por lo menos un nuevo cuatreño porque no es suficiente con todo lo que hay que arreglar.
No podemos seguir endeudando el país, hay que tener austeridad como en las familias cuando el presupuesto es limitado. Hay que hacer ajustes. No debemos seguir permitiendo que los jóvenes profesionales sigan saliendo del país cuando más se necesitan.
-Se critica al gobierno de Puerto Rico el haberse alejado de los países latinoamericanos y del Caribe. ¿Por qué no se tiene la iniciativa de juntos emprender la tarea de rescate en este tiempo de crisis?
-Soy una firme creyente de la unión latinoamericana, fui vice presidenta del anexo de mujeres de COPA, que es la Confederación Parlamentaria de las Américas que incluye desde Panamá hasta la Patagonia. Nos reuníamos todos los años y estuve perteneciendo al parlamento. Fue ahí que conseguí apoyo para la causa de Vieques. Creo firmemente que todos en Latinoamérica tenemos sangre de la misma, la mezcla de indígena, española, africana; la sangre pesa más que el agua. Si estamos unidos nos entendemos mejor y podemos luchar juntos. Lamentablemente en ocasiones no se pueden hacer negociaciones con otros países que no estén bien vistos por Estados Unidos debido a nuestra condición de Estado Libre Asociado.
-¿Cómo se percibe en Puerto Rico las relaciones con Cuba con los nuevos cambios?
Maravillosa!! Los cubanos son nuestros hermanos. La última vez que visité Cuba fue hace como diez años y tuve muy buena relación con Ricardo Alarcón. Desde ahí estábamos esperando que esto ocurriera porque era una injusticia, no tenían razón. Estamos felices de compartir y hacer alianza de turismo para la gente. Yo quería ir ahora pero no he podido debido a mi condición económica que es la de pensionada y trabajo parte del tiempo como legisladora ciudadana en el Municipio de Carolina.
Cabe mencionar que Doña Velda procreó tres hijos, Mirelsa, escritora y psicóloga clínica y Velda, publicista, hijas de Don Héctor Modesti. Y de su primer matrimonio al doctor Freddy Rodríguez, llegue hasta todos ellos nuestro más sentido pésame.