Según la historia nos muestra, llevamos más de cinco décadas usando los mismos sistemas antiguos de operación y oficinas de gobierno. Muchas han crecido exponencialmente y sin control dependiendo de cuánto dinero federal o estatal ha sido usado para crear más oficinas de servicio la cual posiblemente sea un duplicado de otra oficina de servicio.
La legislatura por uso y costumbre creaba una oficina del gobierno nueva y le asignaba fondos millonarios comprometiendo el presupuesto existente. Ahora, nos vemos con la realidad de que algunas de estas oficinas ya no tienen sentido mantenerlas, solo sirven para quemar dinero y emplear a familiares de los mismos legisladores y funcionarios de gobierno.
Todo permanecía callado mientras estaba en papel y en un archivo de metal bajo llave. Ahora que todo va a tener que ser puesto en una hoja de cálculos electrónica van a salir a flote miles de gastos que son ilegales, inmorales y hasta criminales.
La burocracia gubernamental de papel es tanta que han alquilado cientos de edificios privados por miles de dólares mensuales con el fin de almacenar miles de cajas de papel con datos y formas que nunca se van a usar ni hay manera de conseguir lo que se almacena.
Mientras tanto, el resto del mundo digitaliza sus datos y re inventa sus gobiernos de forma eficiente y automático para proveer la información a sus ciudadanos de forma rápida y electrónica, y nosotros en Puerto Rico seguimos produciendo formas de papel y oficinas para hacer filas largas con el fin de mantener empleados que solo ven Facebook en sus horas de trabajo. Las mismas oficinas reducen su operación de 12 del mediodía a 1:00 de la tarde que es cuando la gente que trabaja puede hacer las diligencias.
Otras agencias como el Fondo del Seguro del Estado ha tenido mejores uniones para pedir y negociar aumentos de sueldo, promociones, pensiones Cadillac y hasta concesiones especiales como oficinas con baño, duchas de oro, sillas de quinientos dólares, escritorios de madera sólida y hasta cuatro secretarias por jefe. Esta modalidad de llevar a cabo una operación de gobierno sin medir el costo, ya no es funcional ni productivo para el país. El dinero que existe hoy día ya no podrá sostener esta desigualdad. El milagro de un Banco Gubernamental de Fomento de Puerto Rico ya no podrá ofrecer más dinero para continuar el gasto excesivo en trabajos y agencias que no producen nada para el país.
Mientras que la Universidad de Michigan, Harvard y Yale en los Estado Unidos de Norte América, Europa y Asia expanden su matrícula de cursos en línea al resto del mundo, todos los días a todas horas, la administración burocrática y absurda de Universidad de Puerto Rico sigue sumida en la ignorancia del pasado dando clases en salones con pizarras blancas, cerrando sus puertas a las cinco de la tarde. Mientras que las universidades del mundo expanden y ponen al día sus ofrecimientos de forma rápida y sin burocracia, la UPR sigue con secciones limitadas y secuestradas por dos profesores.
Es de conocimiento general que el sistema de la Universidad de Puerto Rico y sus once recintos ya están bajo la mirilla de la Junta de Control Fiscal. Todavía tenemos rectores, decanos y directores de la Universidad de Puerto Rico con cientos de secretarias, chóferes, carros nuevos pagos por el gobierno, varios ayudantes especiales, abogados y hasta una casa con sirvientes para vivir como reyes y reinas. El sistema universitario y sus once recintos también es considerada una agencia del gobierno que se rige por las misma leyes que todas las agencias. Por mucho tiempo esta agencia se ha manejado misteriosamente, nombrando profesores a cuartos obscuros y usando el proceso administrativo como una pared para evitar compartir su información y participación de la comunidad universitaria. Al igual que las otras ciento y pico de agencias, ninguna se conecta con la otra ni comparten información académica ni administrativa. Cada recinto tiene un sistema separado de información. O sea, se multiplican los gastos administrativos debido a la duplicidad de funciones que tienen cada uno de los recintos. Pero aún tenemos identificado otra situación. Ninguno de los departamentos dentro de cada recinto universitario se conecta con el otro. Todo se corre como fincas privadas dentro y fuera de los recintos las cuales hacen una red de ineptitud que nos lleva al estado que tenemos al presente. Tampoco los recintos le convalidan automáticamente créditos de cursos con la misma numeración de un recinto a otro haciéndole la vida imposible a los estudiantes que dejan su Beca PELL en el sistema.
La universidad debe ser el motor del país en busca de fondos, desarrollando y fomentando ideas, escribiendo propuestas, conectando diariamente con las escuelas del país y del mundo. Debe ser la que lleva a cabo enlaces con toda la industria mundial para colocar a sus graduados en trabajos nuevos. La universidad debe ser auto liquidable y ser responsable de generar sus propios fondos. El enfoque de todo el gobierno se perdió y hay que rescatarlo nuevamente.
El país completo esta digitalmente desconectado y corriéndose totalmente de forma desorganizada. Las escuelas no se conectan unas con otras. Los hospitales, las salas de emergencia, el departamento de la Familia, Policía, el Departamentos servicios de Energía Eléctrica y Acueductos tampoco se conectan ni comparten información. Todo este modelo es para poder tener el completo control de la información el cual resulta en el flaco servicio al ciudadano. El gasto desmedido de dinero y tiempo ya se acaba. No importa quien salga electo, tendrá que doblegarse a la Junta de Control Fiscal y se verá forzado a ser más eficiente y conectar todos sus sistemas de información.