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PAPO LUCCA: GENIO DE «LA SONORA PONCEÑA»

Conocido como «El Niño Maravilloso», «Mr. Piano Man» y «El Rey De Las Blancas y Las Negras» Don Papo Lucca es el Genio de La Orquesta La Sonora Ponceña que cuenta con 60 años de haberse fundado.

En el 1946 nace Enrique Arsenio ‘’Papo’’ Lucca quien dio indicios de ser un niño prodigio desde sus 5 añitos en los ensayos de la orquesta de su padre Don Quique Lucca.

A la edad de once años hizo su debut en la televisión, adquiriendo la orquesta el elemento que necesitaba para escucharse con el sonido tan sonoro que deseaba su padre.

Por su corta edad fue apodado “el niño maravilloso” convirtiéndose en la principal atracción de la Sonora Ponceña, a lo que los empresarios comienzan a exigir su participación en la orquesta. Por otro lado, demostrando tener un estilo propio empieza a producir los arreglos de la orquesta convirtiéndose cada grabación en éxito.

Al paso de los años su creatividad continúa creciendo e incorpora teclado electrónico a la orquesta. Se da a conocer con música popular como la bomba, merengue, guaguancó y sones. provocando sensación con los nombres de las carátulas en inglés con miras a internacionalizarse. Añadiéndo luego música cubana y de jazz a la orquesta.

Decir Papo Lucca es símbolo de excelencia musical, ha desplegado el nombre de su natal Puerto Rico en el mundo entero. Todavía, después de 60 años de haberse fundado La Sonora Ponceña, mantiene el orgullo de compartir escenario con su padre Don Quique Lucca, quien hoy cuenta 102 años de edad y continúa apoyándolo como el primer día.

“Mr. Piano Man”, como también se le conoce, es un visionario como pocos, (de los que no abundan en esta época), demostrando siempre la calidad, la tradición y el sonido incomparable en cada pieza musical. Un derroche de lo mejor de la salsa con su estilo inconfundible, cual perdurará grabado en las páginas gloriosas del repertorio bailable del genio de La Sonora Ponceña. Hombre de pueblo, humilde, cariñoso con su público y querido por su pueblo.

En una fiesta de pueblo en su natal Puerto Rico, Don Papo Lucca conversó con nosotros acerca de su carrera, su querido padre Don Quique Lucca y su música.

¿Cómo está su señor padre Don Quique Lucca?
Pues está muy bien, gracias a Dios.

Don Quique Lucca fue el fundador de la Sonora Ponceña, ¿también tocaba piano como usted?
No, el tocaba guitarra. Junto a su hermano fue el fundador de La Sonora. Pero a los pocos meses mi tío se fue para Nueva York quedándose mi padre con la orquesta.

¿Cómo dio comenzó con la Sonora Ponceña?
Sería como a los once o doce años, por ahí. La orquesta ensayaba en casa, me pasaba los días en los ensayos molestando, así aprendí primero a tocar conga y bongó, luego estudié en la Escuela Libre de Música.

¿Toca usted algún otro instrumento?
He estudiado piano, clarinete y saxofón. Trataron de ponerme a tocar una vez Oboe, (instrumento de viento-madera de doble lengüeta que opera en el rango de soprano) pero lo practiqué un día y salí corriendo y no volví más a la Escuela Libre de Música.

¿Qué siente al saber que tanta gente le admira, respeta, le tiene amor y cariño aún sin conocerlo personalmente?
Ese es el privilegio de uno motivar a veces a muchos músicos. El cariño del público es algo que yo nunca lo esperaba ni lo buscamos pero a través de la música se logró.

Los puertorriqueños al igual que muchos otros latinos entienden que el mejor pianista del mundo se llama Don Papo Lucca; ¿usted también lo cree?
Más bien son títulos que le ponen a uno con un poco de compromiso, que hay veces…como decía Tito Puente:’ Maldita sea la hora en que me pusieron el nombre del “Rey del Timbal”. (Ríe) Hay muchos talentos nuevos por ahí, lo que pasa es que gracias a Dios he tenido una buena exposición discográfica, bastante, pero también mucho sacrificio. Pude estudiar suficiente, gracias a Dios.

¿Hay algún otro pianista a quien usted admire? ¿Quién?
Mi maestro Don Ramón Fernández, del pueblo de Ponce y Luisito Benjamín, quien trabajó en el Ponce Intercontinental durante siete años y lo iba a ver todas las noches. Yo diría que es uno de los grandes pianistas de toda América Latina, el mejor. Lo que pasa es que se desarrolló en un tiempo en donde no había mucha oportunidad en la discografía, no tuvo la oportunidad. Tiene como 3 discos grabados, pero es el mejor.

Después de la Sonora Ponceña; ¿cuál es su orquesta favorita?
Escucho a Ricardo Rey, a Eddie Palmieri, la orquesta de Larry Harlow. Cuando estaba estudiando en San Juan, también trabajé por dos años y medios con la Orquesta Panamericana del maestro Lito Peña. Esas son de las orquestas de más calidad que han existido en este país.

Aparte de la salsa; ¿qué otro tipo de género musical le agrada y cuál le desagrada?
Me gusta el Jazz y lo practiqué durante mi juventud, tuve un grupo por unos diez años. No tocábamos en ninguna parte pero ensayábamos todas las semanas. El Jazz es un género que aquí no tiene mucha salida, me considero más salsero. Mucha gente dice que yo toco jazz. Sí me gusta y lo he practicado pero soy más salsero. Todo tipo de música me gusta, la escucho y de toda uno aprende.

¿Habrá algún artista o alguna otra orquesta con quien le gustaría compartir tarima? ¿Con quién?
Creo que he alternado con todo lo que hay por aquí. Inclusive, el más nuevo es Pirulo y hace como dos semanas compartí tarima con él.

Esa última canción de ‘’Los Zapatos De Mi Viejo’’ es hermosa, posee un claro y bello mensaje dirigido a su señor padre. ¿Habrá alguien que pueda llevar los zapatos suyos?
Esa es una canción de Don Manuel Rivera Cátala, un jíbaro de aquí de Comerío. Los zapatos de mi viejo no los puede llevar nadie.

¿Los míos? Pues no sé, es la calidad de persona que sea uno. En realidad no creo que sea una quinta parte de lo que ha sido él como hombre, como padre, abuelo, bisabuelo, tatarabuelo que ya lo es. Bueno…ya soy bisabuelo y en eso lo estoy alcanzando…

Cuando usted está frente a ese inmenso público que siempre es fiel a la orquesta sin importar dónde se encuentren ¿qué siente, qué pasa por su mente en ese momento?
Compromiso, una deuda que se tiene con ese público. Es siempre reafirmar, tocarles, complacerles y mantener en todo lo que se pueda la calidad.

Sabemos que decir ‘’La Sonora Ponceña’’ es decir Papo Lucca y aunque usted no cante, todos van a verlo a usted, independientemente de que cambien a los cantantes, al público le interesa ver a Papo Lucca tocar el piano. ¿Cómo se siente saber que el público lo considera el mejor y que para la mayoría usted es un ídolo a imitar?
Siempre muy agradecido y reconociendo todo el trabajo que han hecho los actuales miembros de la orquesta, los que ya no están, los que han muerto… esto no es un grupo de dos personas ni de una, toda persona que está en la tarima trabaja, gracias a eso es que se ha logrado la calidad que se desempeña. Que imiten las cosas buenas, las malas no. (Ríe)

¿Qué le falta hacer a Papo Lucca en el mundo de la música?
Seguir cumpliendo la misión hasta el último día de mi vida, que es trabajar y hacer música.

¿Cómo compara la música de salsa de los tiempos de Fania con la de ahora?
Los cambios que existen para bien o para mal los trae el negocio; la tecnología y todo ese engranaje; el poco interés a veces de las compañías disqueras. En estos momentos creo que las compañías que antes respaldaban el género no lo están haciendo. Ahora se enfocan más en proyectar a un cantante y al resto de la orquesta no le dan importancia.

Pero Fania en sus tiempos fue la única que destacó; pianistas, congueros, bongoseros, timbaleros, trompetistas, trombonistas. ¡Todos eran estrellas! Era que se proyectaban, no es que ya no lo sean, es que no les importa.

¿Quién ha sido el mejor cantante que ha pasado por la Sonora Ponceña?
Todos en su momento hicieron bien su labor.

¿Está enterado que una foto con usted vale más que mil palabras?
Bueno, me das los miles y te quedas con las palabras… jajajá!!!(Ríe)

¿Cuál es el secreto del éxito de ‘’La Sonora Ponceña»?
Es que el grupo se mantiene grabando, viajando, tocando, ensayando y no tocando por tocar. Porque es nuestra pasión, nos gusta el trabajo que hacemos.

¿Cuál es la canción que menos le gusta interpretar con su orquesta y su favorita?
En ocasiones trato de no tocar ciertos números porque creo que el público puede estar pensando que siempre ejecutamos los mismos pero hay números que si no lo tocamos, la gente dice que no estuvimos ahí. Personalmente me gustan todos, unos más que otros. Algo que el público no sabe es que en ocasiones el éxito de un número no se debe al gusto de uno en particular sino de ellos.

Un ejemplo; vas a una graduación, tocas nueve temas pero quieres hacer diez, buscas un relleno que para ti no tiene mucha importancia, pero ese es el número que pega. En este negocio hay veces que creemos saberlo todo, sin embargo no sucede ya que el gusto de la gente es el que dicta cuáles son los temas que van a gustar.

¿Cómo se pueden resumir 60 años de éxitos?
Cosas buenas, malas, la partida al otro mundo de mis compañeros… Creo que cada miembro del grupo pasa a ser como un brazo del cuerpo, una pierna, la vista, todo. Es bien triste, personas con las que hemos estado compartiendo por mucho tiempo como por ejemplo;Toñito Ledée (se quiebra su voz) que fue uno de los grandes compañeros del grupo, mi compadre, solamente estuvo como unos siete años con la orquesta pero es uno de los tipos que más se echa de menos por la calidad que era, la clase de persona, un individuo unidor en el grupo. Si ocurría había algún problema era el primero que salía, no a defender una parte ni la otra, sino a tratar de arreglar las cosas. Gente que además de su trabajo y calidad, uno como persona los lleva.

¿Usted le dio continuidad al legado de su padre; quién le dará continuidad al suyo?
Yo espero que la familia: hijos, yernos, alguien. Hay gente que creo que están preparados. La experiencia a lo mejor no la tengan pero, aquí estamos para enseñarles.

¿Cómo le gustaría que lo recordaran el día que ya no esté?
Humm… Bueno, que me tomen en cuenta como siempre y me recuerden. Para eso están las grabaciones, los videos, todo ese material que no va a dejar que la gente se olvide.

Hace poco entrevisté a Don Roberto Angleró, me confesó que ese arreglo que usted le había hecho a su tema “Vas Por Ahí” era espectacular, que haberle puesto violines fue increíble.
Lo que pasa es que con la música que uno hace une parejas y esa pareja a lo mejor 20 años después te presentan al hijo. Yo conocí al nieto de una de las parejas que se enamoró en un baile mío y uno de los temas fue quien los unió. Eso es un privilegio, algo bien significativo en la vida de uno. Por lo menos deja saber que uno está aquí por algo.

Su padre, Don Quique Lucca fue exaltado al Salón de fama. ¿Qué tiene que decir en cuanto a eso?
Privilegio que no esperábamos pero, es mi viejo y yo creo que se lo merece por todas las razones.

¿Cómo va ser esa celebración de los 55 años de Papo Lucca en la música este Sábado de Gloria?
Sí. El sábado de gloria celebraremos los 55 años míos en la música en el hotel San Juan y 79 en general de Don Quique. Los 60 años son de mi papá en la Sonora y el resto con grupos anteriores. Además de La Sonora Ponceña van Willie Rosario, Roberto Roena y La Mulenze. Como cantantes invitados Yolanda Rivera, Luisito Carrión, Moncho Rivera y Manolito Rodríguez. Manolito fue uno de los integrantes que estuvo hace unos años con La Sonora Ponceña.

¿Cómo usted escoge las canciones?
Más o menos con lo que hasta ahora ha dado resultado, la idea es con la misma temática de lo que ha sido éxito y las corrientes que están en el negocio. Siempre soy quien escoge pero, a veces alguno de los muchachos también me ayuda.

¿Algo más que desee añadir?
Que toda mi vida ha sido un privilegio porque comenzó desde el segundo día de haber nacido ya que había ensayo en la casa y no conozco otra cosa. Intenté estudiar ingeniería pero llegó el momento que yo empecé a estudiar en el Conservatorio de música, se empezó a grabar, a viajar y esos deseos de estudiar… pues no había tiempo y no lo tenía tampoco, porque esto es más fácil. (Ríe)

Destacamos que el Sr. Quique Lucca cuenta con 102 años de edad y sigue acompañando a su hijo Don Papo Lucca en sus presentaciones en Puerto Rico donde continúa dirigiendo la orquesta de pie desde que comienza hasta que termina el show por hora y media o dos horas corridas.

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