Puerto Rico sigue acostado, con sed, con hambre, con desempleo, con niños sin escuela pública de calidad y con enfermos que no son tratados por los hospitales sin medicinas y que no tienen energía eléctrica
Los mensajes de la televisión y la radio que “Puerto Rico se levanta” como medio de acondicionamiento mental es para que la gente no se revele en contra del gobierno y sus condiciones pésimas de administrar
Es una vergüenza increíble que en estos momentos tengamos pueblos de la montaña como Orocovis, Morovis y Adjuntas en la obscuridad total. Es una violación de derechos humanos que tengamos el 90% de los ciudadanos de la isla sin energía eléctrica, miles de familias y pueblos sin agua potable a casi tres meses después del huracán. La osadía de parte de muchos al mentirle al pueblo en los mensajes de la televisión y la radio que “Puerto Rico se levanta” como medio de acondicionamiento mental es para que la gente no se revele en contra del gobierno y sus condiciones pésimas de administrar.
Gracias al huracán María, descubrimos que existen dos países distintos dentro de Puerto Rico. Uno de ellos es San Juan y el otro país es el resto de la isla incluyendo el oeste, centro, este, sur, añadiéndole Vieques y Culebra. El primero es donde se encuentra el gobierno central, que controla todo y discrimina contra el resto de los pueblos. Al decir San Juan nos referimos a los ricos de San Juan, a las familias poderosas, dueños de las empresas que dominan las mentes y bolsillos de aquellos que dependen de ellos para salir electos o para conseguir contratos.
Gracias al huracán María quedó a relieve toda la trampa, toda la debacle, toda desorganización, la falta de mantenimiento de sistemas de comunicación eficientes, todos los ineptos y el abandono de los deberes para los ciudadanos pobres de la isla. Ahora, cuando no hay más remedio que mostrar con rabia los gastos millonarios, los prestamos billonarios y el despilfarro de dinero que por décadas se han llevado a cabo en la isla, nos vamos a Washington DC a pedir como mendigos que los federales paguen por todo lo gastado y lo que se debe a los bonistas.
Para sumar a la catástrofe que existe, ahora no se trabaja ni se paga por nada en algunos municipios esperando que FEMA pague por hacerlo. Esa práctica tiene las calles de la isla llena de boquetes que destrozan el tren delantero de los autos y hasta causan accidentes fatales. Siguen las montañas de escombros llenas de ratones esperando por una situación de peste bubónica. Lo poco que se ha hecho ha sido por la gente que ha tomado en sus manos la limpieza de los vecindarios. También hay quien le ha dado la mano a su vecino con un poco de electricidad de la planta de gasolina que todos los días se prende para poder subsistir bajo el engaño de Puerto Rico Se Levanta.
El engaño de decir que la Autoridad de Energía Eléctrica va a tener 90% de energización no es que van a tener el 90% de las casas con energía eléctrica. Eso solo confunde y hace ver que la gente va a tener energía lo cual es una mentira.
Para sumar a la condición critica de la isla y como resultado de la incapacidad de gobernanza, los niños del país han perdido un semestre completo de escuela lo cual no se va a reponer. Eso nada mas es un crimen y violación de los derechos de los ciudadanos de Puerto Rico. Se les ha negado el derecho a la educación a los pobres. La educación es lo único que los va a sacar de la pobreza y que puede mejorar la economía de un país.
Solo hay noticias de edificios, los escolares, como lo mas importante pero no hablamos de educar a los niños como la prioridad. Nos preocupamos por mejorar los edificios y le negamos la educación a los niños cuando podemos adoptar ideas innovadoras para educar, vender productos y servicios en línea en cualquier lugar y con manera eficiente.
El problema es que tenemos un sistema que exige un exceso de permisos del gobierno central y de los municipios que estrangula al comerciante que desea crear su propio negocio. Se puede crear una página de internet simple para Hacienda que se gestione los pagos de forma electrónica. Ahora mismo, sin energía eléctrica, es realmente imposible crear ningún negocio.
El problema es que tenemos un país donde nos negamos a digitalizar las funciones y agencias del gobierno por miedo a despedir empleados que tal vez no ejercen ninguna función. Hay que cambiar la mentalidad troglodita de gobernarnos y de llevar a cabo los servicios esenciales.
El problema es que la Universidad de Puerto Rico no produce dinero en investigaciones de forma agresiva para ayudar al desarrollo y mantenimiento del país. Esto se deba a que por ley recibe automáticamente millones por hacer lo mismo de hace 80 años. Sin embargo, sus graduados y profesores que producen, se van al extranjero y le hacen dinero a las universidades que los contratan sin problemas. Hay que cambiar esa ley para que la nueva universidad esté al servicio del pueblo y que busque dinero con ideas nuevas de forma global.
Puerto Rico sigue acostado, con sed, con hambre, con desempleo, con niños sin escuela pública de calidad y con enfermos que no son tratados por los hospitales sin medicinas y que no tienen energía eléctrica.
Solo con una educación moderna de calidad, un modelo nuevo de gobierno reducido y la integración de la tecnología se podrá llevar a cabo esa función a la velocidad de la luz. Esperamos que entiendan que Puerto Rico sigue aplastado y que no se levanta hasta que hagamos los cambios necesarios pensando en el futuro y nos integremos la globalización sin depender de nadie.