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Mensaje del Gobernador de Puerto Rico y sus planes para el futuro

Este miércoles el gobernador Ricardo Roselló ofreció su mensaje al pueblo de Puerto Rico. En su extenso discurso presentó su agenda de planes futuros, aduciendo en uno de sus puntos, que la economía del país se ha recuperado.  Todo lo mencionado fue como una barra de jabón que se resbala por las manos y en donde faltaron muchos de los problemas que el pueblo puertorriqueño tiene que enfrentar.

Los planes para el futuro de lo que se quiere hacer, pero no se ha hecho.  El secretario de Transportación y Obras Públicas fue elogiado por su trabajo.  En este caso su trabajo fue mantener los boquetes por dos años en las carreteras hasta que finalmente lo removieron para que otra persona se encargara de darle paso a los contratos para reparar los daños en los semáforos, carreteras y puentes.

Es una verdadera pena que tengamos que engañar al pueblo de Puerto Rico haciendo cuentos e ilusiones de lo que se puede hacer, pero no se ha hecho. Se mencionó que el desempleo está mejorando. También que se le van a dar incentivos a la gente para que se queden trabajando en Puerto Rico.

Se le dijo al pueblo que el turismo está mejor que nunca porque en Semana Santa se llenaron los hoteles.  El turismo no se define por unos cuantos días y sí por todas las actividades los 365 días del año.  Para que haya una celebración de un turismo exitoso debemos tener los hoteles llenos todo el tiempo, las salas de espectáculos llenas, los músicos trabajando todos los días en las fiestas y bailes, y los artistas vendiendo sus pinturas y esculturas dentro y fuera de Puerto Rico.

Es cierto que hay mayor números de barcos cruceros llegando a San Juan pero no se quedan por mucho tiempo. Solo vienen de pasada y arrancan para otro sitio donde sí gastan su dinero y se quedan más de tres días.

Aun si se quedan en la isla, ¿que se le puede ofrecer a los turistas? ¿Cuál es la oferta de entretenimiento que tenemos? ¿Los DJ’s de Karaoke para cantar Trap? ¿Cuales grupos musicales, orquestas de música local, obras teatrales, giras turísticas, viajes en bote y otros atractivos tenemos que le podemos ofrecer a los que llegan a la isla? ¿Cuantos guías turísticos tenemos? ¿Dónde?

Si le decimos a todos vengan a la isla y no hay nada que ver más que matanza y miseria entonces no volverán y nos quemaremos como sitio turístico con el mundo.

El gobernador mencionó que han mejorado la educación, pero en realidad los estudiantes siguen reprobándose en las pruebas METAPR y cometiendo fraude a nivel escolar cuando los maestros les dicen las contestaciones. Invitamos al inspector general de los Estados Unidos que mire bien los resultados de los niños de educación especial en las escuelas públicas que sacan 100 en las pruebas pero que tienen retardo severo.

Si vienen las escuelas chárter entonces tal vez tengan éxito siempre y cuando no intervenga directamente la oficina central de San Juan en la operación de las escuelas con exigencias y papeleos.

En el mensaje del gobernador le decimos a los inversionistas ricos alrededor del mundo que Puerto Rico está abierto para negocios, pero no le explicamos que se verán enredados en una madeja de permiso logia, papeles, ambientalistas, robos y tropiezos para montar un negocio con una energía eléctrica carísima (rate comercial), con internet carísimo y con el agua limitada, entonces no van a montar ningún negocio.  Mientras la isla siga en quiebra, controlada por una Junta de Control Fiscal no vendrá nadie a invertir un centavo en negocios.

De por cierto, la Junta de Control Fiscal se supone que uno de sus trabajos es ayudar al desarrollo económico de la isla y ellos han hecho todo lo contrario.  La Junta de Control Fiscal Gasta Sin Control 40 millones Anualmente en contratos del bolsillo de Puerto Rico. No responden a nadie y son los que aprueban todo el presupuesto.

Todos estos sueños pintados en el mensaje del gobernador dependen de la Junta de Control Fiscal y del Congreso de los Estados Unidos. Si la Junta de Control no aprueba el presupuesto de Puerto Rico, entonces el discurso de fue una perdida de tiempo para todos.

 

 

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