En esta semana mayor en que recordamos la vida y pasión del Hijo de Dios, hecho que cambió el rumbo del mundo, es un momento propicio para la comunión y reflexión de nuestro Ser con el Origen, la Conciencia Pura. Reflexión que me lleva a ver la perpetuidad del sistema que gobierna el mundo; no importa el país, la época ni el sistema de gobierno. La tendencia es la misma, ambición de poder y todas las artimañas que la claque prepotente ha utilizado desde el origen para lograr y mantener ese poder depredador. Control que logran bajo engaños creando discordias, guerras, miedos, ira, divisiones y toda baja emoción siendo estas las energías que alimentan su poder y debilita la humanidad.
Dentro del plan estaba la llegada del Mesías y fue así que llega el Salvador. Mesías que no cumplió con el propósito esperado por los líderes de turno de ese pueblo pues no pudo ser manipulado. Jesús fue crucificado por la petición del Sumo Sacerdote de su religión en complicidad con el Imperio de turno, las masas de seguidores y sus lacayos ante la amenaza de perder el control del Poder. El Salvador que con su luz mostraba la verdad con el mensaje de liberación de yugos, leyes, juicios, dogmas humanos limitantes y esclavizantes. Nos mostró la verdad de quien Es y donde está el verdadero Dios, lo describió de forma tan contundente “Dios es Amor” lo que no es del amor no es de Dios.
Al presente aquí y ahora los emisarios del Imperio “La Juntilla” y los lacayos “Gobierno de Puerto Rico” celebran la semana mayor recreando el calvario crucificando a un pueblo. Peones, dictadores impuestos en posiciones usurpadas pues ningún pueblo los eligió para dirigir nuestro camino, recogen las humildes pagas y vida de asalariados para llevar el botín a los usureros. Crucifican la humanidad, pretenden, bajar las pensiones en una cuarta parte (un 25%) ganadas con años de servicios, bajar los días de descanso y enfermedad del trabajador en una cuarta parte en menos de un año, quitar bonos, cerrar agencias y por ende servicios y empleos, vender corporaciones saqueadas por los verdaderos deudores y sus sucios. Y esto solo en esta semana, sin conciencia ni respeto con prepotencia de los falsos dioses como los verdugos del Hijo del Hombre.
Repicando la mejor parte de esta historia, el último día de la semana se levantó de la muerte el Salvador para recordarnos que el poder de la verdad de la Conciencia Pura siempre sale a la luz. Estamos viviendo tiempos de cambios profundos como el fin de este sistema, el poder de transformación de la naturaleza, las crisis sociales, pueblos pidiendo su libertad, no somos una crisis aislada. Tiempo de escoger a quien servimos y que creamos, escoger prioridades. Mostrar con la acción y en coherencia donde están nuestros valores. Buscar en nosotros mismos, hacia adentro, en la quietud de la paz de la conciencia pura para luego levantarnos con la fuerza de saber lo mucho que valemos y quien en realidad somos. Que Así Sea
